Una vez visto el proceso técnico de la alfarería, ahora nos introduciremos en los aspectos sociales y culturales. La variada tipología de las piezas salidas de los hornos de Quart respondía a las necesidades de una sociedad para la que los utensilios de barro eran imprescindibles para muchas actividades cotidianas. Detrás de cada tipo de pieza había una necesidad, una manera de vivir y de hacer las cosas. No toda la alfarería de Quart era negra. Al menos desde el siglo XIX se hace también obra roja, o sea, alfarería de color rojo, oxidada, para competir con otros centros y cubrir nuevas necesidades. Para obtenerla, simplemente no hay que cerrar el horno al final de la cocción. Este ámbito nos habla de la alfarería y de la sociedad que la usaba.